Arona-Vilaflor (ida y vuelta).

Las Eras de Ifonche

El reloj marcaba las 4:18 de la mañana, en el barrio de Vento en Arona. Allí  

estábamos Isa, Luis, Isra y yo, también la de cuatro patas, Ico. Esta era de las pocas partes del recorrido de La Tenerife Blue Trail que aún no habíamos pisado ninguno de los cinco y para disgusto de Luis, por lo del madrugón se me ocurrió realizarla de noche a modo de ensayo de la prueba. La verdad es que sacamos algunas conclusiones,  muy a tener en cuenta para el día de carrera.

Siguiendo el GR-131 en dirección al Roque del Conde, la intensión era la de hacer un entrenamiento a un ritmo medio, más bien de reconocimiento del terreno. Para nosotros la zona era desconocida, aunque al tratarse del GR-131, contábamos con  un firme en muy buenas condiciones. Cruzábamos el Barranco del Rey y ya nos introducíamos de lleno en el sendero. Este en sus primeros pasos,  transcurre paralelo al Roque del Conde en medio de un espectacular mar de margazas, mostrándose bastante llano en sus comienzos. Poco a poco dejábamos el Roque del Conde detrás, al mismo tiempo que el terreno tendía a subir gradualmente exigiéndonos un esfuerzo mayor. Isra se mostraba bastante fuerte y junto con Ico, nos marcarían el ritmo de subida al resto de nosotros. El aire soplaba caliente una vez pasada La Degollada de los Frailitos, lo que nos obligó a parar y aligerar algo de ropa.  Ico e Isra continuaba marcando el ritmo de ascenso, alternando treking y algo de carrera donde se podía. A la vista las eras de Erjos, ya pisábamos el primer obstáculo del entreno. Siguiendo las indicaciones del GR-131, atravesábamos el caserío, llamándonos la atención como con gran claridad se podía distinguir parte de la Vía Láctea en el cielo de Tenerife. Con Erjos a la espalda, el siguiente objetivo era Vilaflor. El paisaje empieza a cambiar, dejábamos las margaritas, cardones y tabaibas, para encontrarnos con los primeros pinos canarios. El piso en este tramo, se endurece por momentos. Sube vertical y parraleramente entre dos barrancos,  por lo que en su mayoría está formado por risco con apenas sedimentos  y tierra en el suelo. A partir de aquí, el sendero tiende a bajar, "ojo a esa zona”, por una zona de rocosa con muchas piedras sueltas y con poco luz fácilmente se puede producir una torcedura de tobillo sobre todo si se baja rápido. Este tramo desemboca en un barranco que cruzas por su cauce. A partir de aquí el suelo mejora muchísimo ofreciéndonos la posibilidad de correr sin problemas hasta la llegada a los últimos repechos de Vilaflor. En este sector Venus nos anunciaba la llegada de la mañana. El sol ya iluminaba las cumbres de Tenerife con un naranja espectacular y hay que decir que con estas vistas se hace más llevadero el camino. Últimos tramos de subida, donde ya nos encontramos con algunos cultivos que nos anuncian la proximidad del pueblo. Tras la subida a una pequeña degollada y ligera bajada siguiendo el curso de una pista, pasamos por el campo de futbol y un hotel espectacular ya teníamos a nuestros pies a Vilaflor. 3 horas, 30 minutos nos había llevado subir hasta aquí. Pequeña parada de unos 20 minutos para reponer fuerzas y de nuevo en camino. La vuelta sería tranquila, al igual que la subida nos lo tomaríamos con calma, tratando de memorizar con el máximo detalle el estado de los tramos con vistas a la carrera.

+ Fotos:

Datos del entreno:

Distancia recorrida: 33,50 kilómetros
Altitud min: 625 metros, max: 1.602 metros
Desnivel acum. subiendo: 1.675 metros, bajando: 1.681 metros
Grado de dificultad:  Moderado
Tiempo:   6 horas 15 minutos
Fecha:  abril 11, 2011
Finaliza en el punto de partida (circular):   Sí
Coordenadas: 5673

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